Sacco y Vanzetti y los Cinco cubanos de Miami presos en EEUU, otro capítulo en la historia mundial de la infamia..

En 1927 el gobierno de los EEUU asesinó a sacco y vanzetti ejecutándolos en la silla eléctrica por un crimen que no habían cometido, para lo que montó un juicio con testigos y pruebas falsas y un jurado parcial y politizado que les declaró culpables. Miles de personas se movilizaron en solidaridad y ayuda a estos inocentes en huelgas y manifestaciones en N.Y., londres, amsterdam, tokio y muchas otras ciudades del mundo para salvar su vida, pero al final fueron ejecutados; no por el crimen de south baintré, que no habían cometido, como todos sabían y se demostró con pruebas, sino por ser anarquistas e inmigrantes italianos, por su lucha social y oposición al sistema político americano. Este capítulo de la historia mundial de la infamia, -tan real que no lo escribió Borges-, es recordado en libros, canciones, artículos, documentales y películas.
Hoy un nuevo capítulo al cabo de 80 años, porque ese mismo gobierno del estado que se autodenomina paladín de la democracia, pero que representa el imperio del capital y de las corporaciones empresariales que arruinan la vida cotidiana de millones de personas y el progreso en decenas de países en todo el mundo; ese mismo que invade territorios y asesina ciudadanos vulnerando el derecho internacional y de gentes, vuelve a concentrar su poder criminal e inmoral en unas personas cuyo único crimen ha sido luchar contra el terrorismo dirigido contra su país, cuba, y lo hace incluso violando su sistema legal para vengarse del gobierno de esta isla, porque no acepta su sistema político, cegado por una furia irracional que le hace despreciar los derechos humanos más elementales reconocidos mundialmente.
Estos cinco jóvenes, nuevas víctimas de la crueldad e inmoralidad humana, son gerardo hernández, rené gonzález, ramón labañino, antonio guerrero y fernando gonzález. Fueron detenidos en el verano de 1998, y desde entonces sometidos a condiciones de detención inhumanas, negándoles el derecho de defensa, incomunicados en ocasiones de sus familiares y abogados, para, después de un proceso judicial amañado en miami con jurado parcial y en ambiente de odio contra el gobierno de cuba, ser condenados a sentencias de muchos años de cárcel. En la realidad de los hechos, su única actividad fue recabar información sobre los actos terroristas de los grupos opositores cubanos residentes en miami, información que entregaron al gobierno norteamericano para que la policía y jueces pudieran actuar contra estos terroristas que atentaban contra cuba ametrallando sus playas y hoteles y ponían bombas en la isla. La respuesta del gobierno americano, sin embargo, fue detenerlos para procesarlos y condenarlos en una inaudita farsa de proceso, en un aquelarre judicial y mediático contra estos cinco inocentes llenos de vida, con familia, hijos, amigos e ilusiones.

Esta injusta situación ha sido denunciada por la comisión de derechos de la ONU, por colegios de abogados de EEUU y de otros paises, por 10 premios nobel y por multitud de personalidades de diferentes paises, celebrándose miles de manifestaciones en ciudades de todo el mundo exigiendo su libertad inmediata. Pero el gobierno americano, el mismo a cuyo presidente le acaban de dar el nobel de la paz (bendita ironía!!), continúa haciendo oídos sordos a este clamor mundial, silenciado por el aparato mediático del imperio, incumpliendo sus mismas leyes, incapaz de rectificar y reponer a estos cinco inocentes en su derecho inalienable a la libertad del que llevan privados injustamente más de una década… (479)