Joanmarti Blog's, impresiones e ideas

En los últimos tres siglos, la revolución tecnológica creó un montón de bienes y servicios nuevos para la humanidad. Algunos de estos bienes sirven de vehículo para transmitir e intercambiar ideas y sensaciones entre los miembros del género humano, para compartir imágenes, sonidos, vivencias, fábulas, emociones.. Estos bienes, etiquetados a menudo como culturales, deberían ser libres y al servicio del bien común, pero los de siempre, los mercaderes avaros, los guardan en cofres cerrados que sólo abren previo pago de un precio; el que ellos deciden poner libremente para llenar sus cuentas corrientes, ya de por sí a full..

Estos “precios” no los regula la colectividad, ni el estado, simplemente los ponen estos tipos, los más espabilados de la clase, a su libre albedrío, de forma abusiva, con el desparpajo de su propaganda de que los establece el mercado, la libre competencia y la igualdad de oportunidades; el laissez faire que ya decía el viejo adam smith hace un porrón de años y del que estos bordes han hecho dogma y doctrina. Y, ya puestos tomarnos por idiotas,  los tíos quieren que confundamos “precio”, que es el quantum monetario que decide su ánimo de rapiña, con “valor”, que, -sin perjuicio de la vieja teoría marxista de la inversión en horas de trabajo, materia prima, etc.,- es la inversión monetaria que estos humildes sufridores, nosotros, estamos dispuestos a realizar en el capítulo de emociones de nuestra cesta de la compra.

Para garantizarse sus resultados, los tipos invierten en I + D, mantienen ocultas las tecnologías por años hasta que exprimen el rendimiento de sus artefactos anteriores, que dejan morir obsoletos y, al tiempo que sus productos, ya digo, fabrican sus políticos, legisladores y leyes; sus tarifas, cánones, rol del «beneficio industrial» y sobreprecios; sus tipos penales de propiedad intelectual, sus copyright, sus agencias de protección de patentes, sus sociedades de autores, etc.

Frente a ello, mayormente por la escasez de cash, más que por ánimo contestatario y por ideología, y también por el placer de transgredir y por mejor sobrevivir a la rapiña de estos golfos, padres benefactores del mundo mundial,  surge la anarquía de la libertad de compartir, los p2p, los tops manta, los clone, neros, copias y similares, usando la libertad, la poca que aún nos queda, en el reparto de contenidos a los pobres, a los no privilegiados que, aun sin money, también tienen sus suspiros y sus emociones.

Y es entonces cuando estos jetas se dan a dios y al diablo y desde sus teles, radios y demás falsimedia, con sus presentadores y sesudos periodistas a nómina nos llaman piratas, antisistema y otros motes, rabiando porque les birlamos un euro cada vez que nos emocionamos con un gorgorito en la canción de moda bajada free price en mp3 o viendo una peli en horrible screener de las cuatrocientas infames que producen cada día.. Y es entonces, ya digo, cuando nos echan encima su jauría, su sistema de leyes, polis y jueces y a su teddy esperpento.., y nos amenazan con cerrar webs, perseguir programadores, hackers, servidores anónimos, etc., y el resto ya es conocido, basta con mirar la prensa de cada día..

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