Hablaba yo hace unos meses (http://joanmarti.net/2015/01/26/el-psoe-y-los-munecones-triste-epilogo-en-el-crepusculo-de-las-ideologias-patrias/), del fraude o superchería del dilema Pedro/Susana, engañifa mediática burda de estos dos y sus ayudantes: «Cuando llevan desde el 1982 gobernando, en varios periodos en lo nacional, y siempre en algunas comunidades y en miles de ayuntamientos, diseñando, dirigiendo y gobernando el tejido social, legal y político a su libre albedrío, parece que los millones de parados, los miles de desahuciados y las situaciones de marginalidad, deseconomías familiares y exclusión social no son cosa suya, y por eso de nuevo, por enésima vez, nos piden otra oportunidad, otro acto de fe, ahora en los caretos y carteles de estas dos bellezas para superar la ausencia de telegenia del Rubalcaba, quien -imaginan- fue la clave de sus desastre por ser calvo y feo… No han entendido nada: pedíamos ideología y nos dan un tarjetón de boda/divorcio de dos panolis con discurso plano… Esperábamos ideología, ya digo, programa social y soluciones, y por todo remedio al cabo de 35 años de nuevo nos ofrecen una fotografía como mejor argumento, autoexcluyéndose de su responsabilidad en la gestión del desastre social que surgió del frío. De quién son pues los parados, los marginados, los sin casa, los expropiados? Acaso es cosa divina, un castigo? Acaso una plaga, la plaga de la Eurozona enviada por dios a los impíos? Nos mandó dios la crisis económica y el desahucio por nuestra falta de fe o por nuestro sometimiento durante lustros a estos vendedores de crecepelo?»
Desde entonces a hoy otra vuelta de tuerca, y en el capítulo actual la simplificación mediática llega a notable cuando afirma que es que el tal Pedro es el ala izquierda del PSOE, el que quiere el no a Rajoy y la voz de los militantes y la Susana y los barones los que quieren la abstención, y así desatan pasiones, pancartas e insultos entre sus partidarios y escenas de escrache y guardia civil en la sede de su partido, cosa de vergüenza ajena. Vivir para ver. Pedro, el apadrinado de la propia Susana, Rubalcaba y los barones de entonces, de hace dos años, el ala derecha para frenar a Madina, el ala izquierda de entonces, es ahora el izquierdoso; justo el mismo Pedro que intentó la investidura con la ultraderecha liberal del ibex 35 naranjito hace unos meses; el mismo líder que culmina la catástrofe electoral del partido, el mismo demócrata que fulminó a Tomás Gómez y a Carmona y «pasa» de los acuerdos de los militantes al hacer las listas gallegas, es ahora el defensor de las primarias y la voz de los militantes… Por su parte, la Susana, la del clientelismo subsidiado, los EREs, la fobia antinacionalista, los lugares comunes el balbuceo y las frases hechas, agrupa a al otro grupo de socialistas de pro, y ambos se encarnizan en una guerra de los tuyos contra los míos…
Triste destino el de los honestos militantes de base de PSOE, obligados a tomar partido entre la insustancia y la banalidad o la banalidad y la insustancia, a elegir entre dos muñecones de frases hueras y lugares comunes a quienes cualquier ideología que no sea su rol personal y glamour del poder les produce franca repugnancia. Y tristes nosotros, sufridos televidentes, que andamos enganchados a la tele para ver el reality show, participando como extras en el burdo espectáculo, aportando nuestra mejor simplicidad acrítica para construir personajes «buenos» y «malos»
(1703)
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