Joanmarti Blog's, impresiones e ideas

Es precisamente la frase que da inicio a la serie de posts, “Que la corrupción nos alcance a todos”, la idea final, el leit motiv, que guía el embelese cleptómano de nuestros políticos desde tiempos inmemoriales; la obsesión de llevárselo crudo, de robar en beneficio propio y en perjuicio del colectivo social.

La corrupción, al contrario de lo que graznan los falsimedio pretendiendo, dicen, “dignificar” la política con mayúsculas, no es la excepción, sino la regla en la gestión del Estado, el estado “natural” de la clase política. La supuesta excepcionalidad que peroran los tertulianos cada día, defensores de la cháchara y el glamour de lo políticamente correcto, y que obviamente ellos no se creen, es simplemente el “descubrimiento” de cada caso, los picos del mismo iceberg sumergido en la totalidad de la geografía de la piel de toro que ya apareció en FILESA, MALESA, TIME EXPORT, JUAN GUERRA, CASO NASEIRO, en el siglo pasado, para continuar en PALLEROLS, GÚRTEL, MARBELLA, ORANGE MARKET, DEPURADORA DE VALENCIA, etc.

Es este un gigantesco continente de corrupción que salpica las 50 y tantas provincias y amenaza con tomar nombre de cada pueblo de los 8 mil y pico de la geografía hispana.  La corrupción, no es la excepción y sí lo “normal” en los hábitos de nuestro políticos y gestores; el magma que empapa la ideología de estos sinvergüenzas vividores de la colectividad, sin distinción de partido o programa electoral, ya que el programa común a todos ellos, su propuesta de acción de gobierno, es simplemente ROBAR.. Para ello entran en la política a «hacer carrera», si bien disimulan con grandielocuentes declaraciones de abnegado amor al servicio público, al Estado, a sus conciudadanos, lanzando sus proclamas a todo aquel que los quiera oír..

Aquí tienen el mapa de la corrupción patria Con más o menos exactitud, ahí están los datos, el rastro, el corpus delictide su fechorías, y basta con agrandar la imagen del mapa con un clic para “ver” el panorama nacional.

A día de hoy, ya poco se puede añadir sobre el asunto, cuando corren ríos de tinta y de bits reflejando el gigantesco saqueo en decenas de casos que afectan a centenares de políticos y partidos, de gestores “democráticos” de la colectividad, en claro abuso y robo a los ciudadanos que dicen defender o representar.

Tanto da hablar del caso Bárcenas, el asunto Gürtel, los ERE de Andalucía, el caso Pallarols o cualquiera de los otros centenares de sucesos de corrupción, objetivados en tipología penal de prevaricación, cohecho, malversación de caudales públicos o simple tráfico de influencias. Sería simple reiteración de ejemplos trufada de indignación e impotencia. En cuanto a nombres propios, tanto da hablar de Urdangarín, Torres, Camps, Costa, Calatrava, como de Bono, Pepe Blanco, Jaume Matas, Rato, Zerolo, Muguruza.. Son incontables los casos, como diversas son las modalidades de corrupción. Si quieren ver la diversidad casuística, simplemente pinchen este impresionante cuadro del Corruptódromo nacional (e intenten sobrevivir al shock..)

El último escándalo que ha venido a sobrecoger a la ciudanía ha sido el caso Bárcenas, en el que de forma documental se demuestra que el PP recaudaba un dinero ilegal de empresarios y lobbistas y lo repartía entre sus dirigentes, los cuales a menudo cobraban tres sueldos: Un sueldo oficial como parlamentario, alcalde o concejal, otro como sueldo en «blanco» del propio partido y otro en «negro» de la misma organización política.  Tres sueldos suculentos, mientras la marginalidad y pobreza crecían en el país y miles de personas pasaban necesidad, sin trabajo y a menudo sin prestación de Desempleo o incluso sin el subsidio de 426€ al mes.

En los papeles de más abajo, se ven cobros durante varios años del propio Mariano Rajoy, de Pedro Arriola, o regalos como  “Trajes Mariano”, “Corbatas presidente” o “Trajes M. R.”, cobros también de  Javier Arenas, Francisco Álvarez Cascos, Rodrigo Rato o Jaime Mayor Oreja. Justo de los mismos granujas que nos dan moralina y nos predican el estímulo espiritual de buenos ciudadanos, eso de  «hacienda somos todos», cumplir nuestros deberes, ser patriotas de bien y todo eso.. Y en la lista de «cotizantes» para financiar estos «sueldos» aparecen  el empresario José Luis Sánchez, Manuel Contreras,  y un tal Piñeiro, asi como la cadena de supermercados Mercadona de Roig.

LOS «PAPELES» DE BÁRCENAS

Sin embargo, frente a la evidencia documental contable de estos «papeles», prueba plena según derecho, la única explicación de Rajoy y sus seguidores y beneficiarios ha  sido negarlo, simplemente negarlo, y decir que si no los creemos nos enseñan sin problemas su declaración de renta!!. Ciertamente ahora ya está claro que nos toman por imbéciles.

Mientras tanto, la ciudadanía sigue en estado de shock y continua la recogida de firmas (clicar). Ya cerca de un millón de personas reclama la dimisión del gobierno de ladrones que saquea el país y que ha sido pillado con las manos en la masa en el referido caso Bárcenas, pero a ellos les da igual, porque tienen el parlamento con su flamante mayoría, sus teles y sus periódicos..

El «merito» de los papeles de Bárcenas, si acaso tienen alguno, es que demuestran negro sobre blanco la corrupción sistémica en su globalidad, ya sin lugar a dudas, pues objetivan en datos incuestionables como el partido que gobierna practica la prevaricación, el soborno y el tráfico de influencias; el robo, en suma, del dinero público que pertenece a la colectividad, pues de ella sale vía impuestos.

Demuestran a cualquier ingenuo, que lo que «aparece» en algunos medios, lo que se descubre en los casos judiciales, es, como decía, no la excepción, sino la regla, las puntas del iceberg sumergido en la totalidad de la piel de toro; que la corrupción forma parte de la naturaleza intrínseca del aclamado «sistema» democrático, aunque aquí, a diferencia de lo que sucede en algunas dictaduras igualmente corruptas, requiere de una teatralización cuatrienial: de partidos, costosas campañas electorales, debates sobre la banalidad, de programas electorales que no se cumplen y, sobre todo, requiere de falsimedios igualmente corruptos que desinforman y ocultan la realidad a la masa social para que las élites de siempre continuen llevándoselo crudo en una orgía de robos, complicidades y rivalidades en el mismo colectivo global de ladrones y sinvergüenzas.. (Aclaro que los falsimedio, algunos de sus miembros, -El País y El Mundo, esta vez-, sólo dan la noticia cuando, ocasionalmente, su beneficio de vender periódicos o publicidad supera al beneficio que les proporcionan, o las presiones, del colectivo de élites corruptas al que sirven)

To be continued..

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