Joanmarti Blog's, impresiones e ideas

Es «funciopolitico», valga el palabro, desde tiempos inmemoriales; aprox desde 1968. Desde entonces chupa de la ubre pública productos lácteos y derivados con toda naturalidad, como rómulo y remo de la loba romana esa de la leyenda; él como funcionario o como político, ejerciendo arte de eficiente gestor de el capital en su acepción de sistema económico que definiera marx. Se doctoró en ciencias políticas, luego se licenció en derecho y masterizó y remasterizó, como los lps de vinilo, en economía europea, ramoneando en el erario público como técnico comercial del estado en sus años mozos y luego como ministro o viceministro, mayormente, desde que cogió la vez en sucesivos gobiernos que ya no ha soltado.. Es uno de los llamados independientes del psoe, como lo fueron garzón, belloch y algún juez gallego cuyo nombre no recuerdo y que salió de estampida cuando felipe, pero también lo podría ser del pp sin mayor problema, porque es gestor apolítico, un tecnócrata que se decía antes, funcionario de vocación al servicio del sistema, de su nómina, gabelas y prebendas, mande quien mande, y bien sabe él que siempre es el mismo. No engaña a nadie y sirve con devoción a las empresas y corporaciones que dominan el sistema, mas allá de molestos rifi-rafes partidistas del día a día que ni le importan y hasta le incomodan. Responsable en buena parte de la hecatombe que vivimos, -y no por ministro de economía, que es algo contingente, si no por su papel de ideólogo y gestor desde hace años de la regulación (desregulación) del sistema-, después de llevar a la ruína a la mitad de la población española -trabajadores, pequeños ahorradores, inversores de medio pelo, mileuristas, hipotecados, etc.-, anda tan relajado que hasta se le ha curado el tic del ojo que le guiñó al pizarro cuando el debate aquel de tv y así que, feliz y contento como recien cagado, perogrulla de vez en cuando alguna frase para la doctrina económica. Y es su última ocurrencia, dirigida a banqueros y público en general, la que me tiene francamente conmovido:

«es tan malo negar préstamos a los solventes como concederlos a los insolventes». Dios, tal que así habló Zaratustra!!. Idea tan densa plantea algún problema de concepto, y hasta de paradigma. Cabe preguntarse: puesto que es improbable que el dinero lo necesiten los solventes.., si no se lo prestan los bancos a los insolventes momentáneos para que se hagan un poco solventes y refloten su actividad de empresa, trabajo y consumo,  ¿para qué coño sirven los bancos?, ¿qué funcion social cumplen? Pues para eso, para que el gobierno (el socialista) les de el jarabe  reconstituyente del dinero público del estado (el nuestro, el de los ciudadanos arruinados), comprándoles sus créditos morosos y fondos fallidos y dándoles cash, para que sanen y equilibran balances y, en pura gratitud, que agradecidos siempre fueron, sigan estrangulando la economía y hundiendo a to quisqui sin dar créditos a nadie.  Por eso aparece este hombre y les da cobertura teórica con pedo doctrinal de lógica cartesiana.. de gestor de bancos, que no de ministro de economía de un país de pobres arruinados, lo cual que el de el pinoso sin duda se ha ganado lugar por derecho propio entre los grandes del pensamiento económico (smith,  david ricardo, stuart mill, marx o el mismo keynes) con gran derroche de sensibilidad social..

Lógico, pues, que algun resentido afirme la evidencia empírica de que dios no existe en que nunca veremos a este hombre-funcionario-ministro  en la cola del paro o pidiendo un préstamo a largo plazo y bajo interés; acaso porque es mito y no realidad la leyenda del «chupacabras» andino, y mucho más que el dicho animal mágico deambule por la españa en sus ratos de asueto vara vampirizar a pobretes y menesterosos..

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